TRABAJO

El trabajo es uno de los bloques sólidos de nuestra vida, nos acompaña durante buena parte de ella, de hecho, dedicamos al trabajo durante casi un tercio de nuestra vida, por lo que debemos considerarlo como la base de nuestra vida.

¿Por qué la base de nuestra vida? Es sencillo, cuando una tercera parte de tu día lo dedicas a trabajar, esto tiene que ser algo, que basado en tus gustos, características, aficiones, creencias, etc., te aporte algo significativo a tu vida cotidiana. No será lo mismo aquella persona que trabaja en algo que personalmente no le aporta ni un ápice de ilusión, motivación, felicidad… a aquella persona que sueña con su trabajo, se ilusiona por lo que hace y piensa en qué hacer y cómo hacerlo mejor.

Pero no nos confundamos, no quiero decir que lleguemos al punto de obsesionarnos con nuestro empleo, pues todas las obsesiones no son muy buenas que digamos, es más, un trabajo no debería ocuparte más del tiempo mero necesario, el hombre necesita tiempo libre para gastarlo en lo que verdaderamente es importante para la persona, ¿imaginas poder tener tiempo para tus aficiones, jugar con tu hijo y arreglar esa vieja motocicleta?

Si llegamos a encontrar el punto de inflexión donde hacemos algo gratificante para nuestra persona, algo que nos interese, que nos motive y que nos entusiasme… conseguiremos que casi una tercera parte de nuestro día sea recompensado.

Si tenéis que elegir, descartar ese empleo donde ganaríais mucho dinero pero que la esencia del trabajo en sí no os llama la atención, pues sólo conseguiréis que vuestra vida no cobre sentido, perder motivación por el día a día y sobre todo, no conseguiréis ser felices, incluso aun teniendo un poco más de dinero en los bolsillos.

¿Crees que merecería la pena levantarse cada mañana sin ganas para hacer algo que no quieres tan sólo por dinero? Por desgracia vivimos en un mundo donde muchos contestarían afirmativamente a esta pregunta.

Si ya escogiste y te has dado cuenta de que te equivocaste, aún puedes remediarlo, el cambio está en tus manos, tan sólo tienes que encontrar la forma de conseguir descubrir aquello que te apasiona, cuando algo te ocupa gran parte de tu vida cotidiana, precisamente es eso lo que necesitamos, pasión, pasión por lo que haces para poder levantarte cada mañana con una sonrisa.

Quizás para conseguir lo que deseas tengas que hacer un gran cambio en tu vida, donde tu vida social y económica se vea afectada por algunos factores externos, es posible incluso que necesites cambiar hábitos muy arraigados, pero ten el convencimiento de que tu propia felicidad es mucho más importante, nunca pienses que ya es demasiado tarde.

Dichoso el que gusta las dulzuras del trabajo sin ser su esclavo. [Benito Pérez Galdós].

VIDA

La vida es uno de nuestros bienes más preciados, a veces poco considerado como tal, pues es fácil olvidar y no tener presente la importancia que requiere.

Hay personas que pensarán que la vida les da la espalda, otras que la vida les sonríe, para otros muchos... la vida será simplemente un periodo de tiempo en el que nunca se habrá parado a pensar en el verdadero concepto de la vida. Lo cierto es que, dependiendo del punto de vista de la persona, la vida significará una u otra cosa, todas con su indudable importancia.

Por todo ello, en un principio, no es demasiado importante el cómo sino el qué y el cuándo. No es importante cómo experimentas lo que vives si lo que vives y cuando lo vives te hace sonreír, te hace llorar, te hace gritar, saltar, te hace sentir vivo. Precisamente eso, sentir, es la principal característica de la vida, ella nos hace vivos y somos nosotros los que tenemos que luchar por sentirnos vivos, no hay una formula exacta que nos permita descubrir qué es lo que nos hace sentir vivos, por suerte, la variedad en las personas hace que la vida sea aún más gratificante, pues sólo tú sabrás qué es lo que quieres y lo que le pides a la vida, sólo así podrás encontrar lo que buscas para que cuando mires atrás lo hagas sonriendo.

Esto último, sonreír ante un hecho pasado, es uno de las señales que nos indican si hemos vivido lo que hemos querido. Podéis hacer la prueba y pensar en algún momento de vuestra infancia, el primer beso a ese chico o chica, los años en el instituto o en vuestro primer empleo, seguramente es reportarán grandes recuerdos que despertarán casi sin quererlo una tímida sonrisa en vuestro rostro.
Lo verdaderamente importante de esto es que curiosamente, al rememorar tiempos pasados, predominan los recuerdos alegres, incluso aun recordando momentos difíciles de nuestra vida, podemos mirar atrás sonriendo por saber que tuvimos la fuerza para superarlo.

La vida está llena sorpresas, sorpresas buenas y también malas, por eso hay que sentirse vivo en cualquier circunstancia, porque... ¿qué pasaría si supieras que hoy es tu último día de vida? Con casi total seguridad que ninguno de vosotros haríais lo que hacéis en un día normal, todo el mundo querrá hacer en un día lo que no ha podido hacer en un mes o un año ¿cierto?.

Cada día de nuestra vida es extraordinario y como extraordinario tenemos que vivirlo, de forma que cuando te vayas a dormir cada noche estés convencido de que has hecho todo lo que querías, debías o tenías que hacer, no pienses en hacer algo especial cada día, pues todo lo que hagas ya es especial, sabrás que lo has logrado cuando justo al cerrar los ojos no pienses en nada.

Todo lo que hagas en la vida será insignificante, pero es muy importante que lo hagas porque nadie más lo hará.

VIDACIDAD

Vidacidad nace como fruto de la unión entre VIDA y FELICIDAD. Un espacio de reflexión sobre la vida con el cual espero que muchos de vosotros os sintáis identificados de una u otra forma.

Vidacidad no existe como tal en ningún diccionario de la Real Academia Española, aunque su definición podría ser tan extensa como muchos quieran. 

Aquí la definimos con palabras como Ilusión, Sacrificio, Entusiasmo, Trabajo, Problemas, Constancia, Decisión, Fuerza y un largo etcétera del cual os animo a participar, pues sólo así es como encontraréis el verdadero significado de VIDACIDAD.